Cuando se
trabaja a lápiz se deben procurar trazos oscuros y nítidos, un trazo suave
producirá letras grises e imprecisas. El orden de los trazos y las dimensiones
de las letras deben aprenderse practicando inicialmente con el lápiz antes de
ensayar con tinta.
El lápiz debe
tener punta cónica de dureza 2B o HB. Limpiarlo periódicamente
La mina debe
afilarse de forma que se obtenga una larga punta cónica. La presión del lápiz
sobre el papel debe ser lo más uniforme posible y es conveniente acostumbrarse
a hacer rodar el lápiz entre los dedos cada tres o cuatro trazos, para
conseguir una mayor uniformidad. El lápiz debe sostenerse en la mano con la
fuerza mínima necesaria para controlar los trazos.







No hay comentarios:
Publicar un comentario